El petrolero 'Max Jacob' abandona el Puerto Exterior de A Coruña tras solventar su avería evitando un grave riesgo medioambiental

El barco, con una carga de 148.000 toneladas de fuel, navegaba frente a la costa gallega con un fuerte mar de fondo y solicitó el atraque por una avería en su motor.

Tras atracar sin contratiempos, permaneció desde el 23 de diciembre en el muelle principal reparando una turbina y partió rumbo a Estados Unidos pasadas las 15.00 horas.

El presidente de la Autoridad Portuaria subraya que el proceso se desarrolló con normalidad y eficacia, demostrando que Galicia está preparada para afrontar los riesgos del intenso tráfico que atraviesa su corredor marítimo.

El petrolero 'Max Jacob', que permanecía atracado en el Puerto Exterior de A Coruña desde el pasado 23 de diciembre, abandonó hoy el muelle de Langosteira tras completar los trabajos para arreglar la avería producida en sus motores. El buque tanque, de 274 metros de eslora, 48 de manga y 82.000 toneladas de registro bruto, navegaba frente a la costa gallega en medio de un fuerte mar de fondo y olas de cinco metros cuando sufrió una incidencia que le obligó a solicitar autorización para atracar en el Puerto de A Coruña.

La situación era especialmente delicada debido a que el 'Max Jacob', con un calado de 16,5 metros, portaba una carga de 148.000 toneladas de fuel que trasladaba desde Rotterdam a Estados Unidos. Las condiciones del Puerto Exterior para facilitar el acceso y la maniobrabilidad de grandes buques, con 22,5 metros de calado tanto en el canal de acceso como en el muelle, permitieron que esta situación se solucionase sin contratiempos.

El carguero accedió al canal de acceso al muelle principal del Puerto Exterior el pasado 23 de diciembre. Tras proceder a reparar una de las turbinas de su maquinaria, que era el elemento que presentaba problemas, el buque partió hoy sin contratiempos rumbo a Estados Unidos pasadas las 15.00 horas. La ejecución de los procesos de atraque, reparación y partida del buque sin incidencias, en pleno invierno y en condiciones meteorológicas adversas, ha puesto de relieve la capacidad del Puerto Exterior para albergar a buques que sufren algún contratiempo, gracias a sus condiciones de acceso, sus grandes calados y el abrigo de la lámina de agua que proporcionan el dique principal y el contradique. La eficacia con la que se desarrolló esta delicada operación evitó incidencias de gravedad, al tiempo que alejó de la costa coruñesa cualquier riesgo de contaminación ambiental.

En este sentido, destaca el trabajo desarrollado por la Capitanía Marítima, los remolcadores de tráfico interior pertenecientes a la UTE Sertosa Norte (del Grupo Ibaizábal), y de los prácticos del puerto coruñés, que desde el propio buque coordinaron la maniobra de entrada a Puerto junto con el capitán. La capacidad del Puerto Exterior para albergar operaciones de distinta naturaleza en condiciones meteorológicas adversas ya se había constatado con los diferentes procesos de embarque y desembarque de mercancías como grandes estructuras, vehículos y distintos graneles energéticos y agroalimentarios. Ahora viene a sumarse otra constatación sobre el terreno que refrenda la capacidad de Punta Langosteira para preservar la costa urbana de las mercancías más sensibles.

Desde la puesta en servicio del Puerto Exterior, y en pleno proceso de traslado de operadores, ya se han movido más de 3 millones de toneladas. El crecimiento ha sido exponencial en el último año, ya que son cada vez más los operadores que apuestan por implantar sus instalaciones en Punta Langosteira e incluso ampliarlas para incrementar su actividad. Con más de 90.000 metros cuadrados de capacidad, la superficie de almacenamiento de graneles ya es superior a la existente en el puerto interior, y esta cifra seguirá aumentando progresivamente conforme avancen los procesos de traslado e implantación de nuevos operadores.

El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Losada, señala que la rápida respuesta del Puerto ante el hecho de que “un megapetrolero se averíe frente a las costas gallegas con casi 150.000 toneladas de fuel a bordo en pleno mes de diciembre, no sólo ha neutralizado un importante riesgo ambiental, sino que ha demostrado el rigor y la responsabilidad con la que se abordan los problemas”. En este sentido, subrayó que “el proceso se ha desarrollado con normalidad y eficacia, lo cual sólo es posible si se cuenta con una infraestructura adecuada, preparada y solvente técnicamente como Punta Langosteira, y con equipos humanos tanto en la Autoridad Portuaria como en los servicios portuarios que están implicados en el desarrollo del puerto”.

Concluyó Enrique Losada que esta incidencia es la mejor prueba de que Galicia está preparada para afrontar los riesgos que se derivan del intenso tráfico que atraviesa su corredor marítimo. Losada acudió a Langosteira a presenciar la maniobra de desatraque, junto a técnicos de la Autoridad Portuaria, el subdelegado del Gobierno, Jorge Atán, y el alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo.