El humo tóxico generado en las bodegas impide el acceso de los expertos al buque, además existe un riesgo alto de explosión del nitrato de amonio que también impide que los remolcadores viertan agua o espumógeno sin que pongan en riesgo su seguridad.
El Cheshire se encuentra en estos momentos a unas 60 millas al sur de Gran Canaria, sin gobierno, y en su entorno se haya situado el buque de Salvamento Marítimo 'Punta Salinas' a la espera de la decisión final del armador y de la posible deriva de la situación.