La zona de actuación, situada a lo largo del litoral de Girona y Barcelona, se considera un espacio de gran importancia ecológica debido a la alta concentración de especies amenazadas. Hasta 2026 se llevará a cabo un programa de acciones en estrecha colaboración con la comunidad científica, administraciones y el sector pesquero para tratar de mejorar el estado de conservación de hábitats marinos profundos.