La CEV denuncia que las dos jornadas de huelga en el Puerto de Valencia han supuestos pérdidas de 10 millones de euros

Según la organización empresarial valenciana, las ramas productivas empresariales más afectadas por la huelga en la Comunidad Valenciana, "sin duda", la del azulejo, la de vehículos y sus componentes y el transporte terrestre.

La Confederación Empresarial Valenciana (CEV) relata, en un comunicado emitido ayer, que el conflicto de la estiba está causando el desvío de buques a otros puertos no españoles – principalmente Sines y Tánger-, con todas las consecuencias que ello acarrea en cuanto a retrasos y costes en el import-export, así como la pérdida de confianza de clientes de nuestros productos, que puede derivar en compras puntuales, que pueden ser definitivas, a otros países.

Por ello, denuncia la CEV, "a las pérdidas directas que el conflicto está causando a las Autoridades Portuarias, las empresas estibadoras y las empresas navieras, hay que añadir las pérdidas que soportan las empresas que exportan e importan por vía marítima, así como el perjuicio que está sufriendo en primera derivada la rama de la logística".

Según la organización empresarial valenciana, las ramas productivas empresariales más afectadas por la huelga en la Comunidad Valenciana, "sin duda", la del azulejo, la de vehículos y sus componentes y el transporte terrestre.

Tal y como han trasladado a la CEV los principales agentes y sectores afectados, se estima que el coste total para la Comunitat –entre directos e indirectos- por día de huelga completo asciende a unos 5 millones de euros diarios. Por tanto, relata el comunicado, las dos jornadas de huelga convocadas hasta ayer han supuesto unas pérdidas para los sectores económicos de la Comunitat Valenciana que ascienden a 10 millones de euros, a los que habría que añadir las derivadas de las jornadas de paros parciales convocados la pasada semana y las 23 jornadas de marcha lenta que han afectado a los puertos en lo que llevamos de año.

Además, finaliza el comunicado de la CEV "a estos costes millonarios hay que añadir el coste reputacional que sufre nuestro país, cuyo monto sólo se podrá estimar en el medio plazo pero que, sin duda, habrá minado el tremendo esfuerzo de empresarios y trabajadores por asentar y conquistar mercados, generando riqueza, empleo y bienestar".