Navantia logró contratos por valor de 986 millones, de los que 627,1 millones corresponden a nuevos programas de construcción naval

El nivel de ocupación global del ejercicio fue del 71%, 14 puntos superior al del año anterior, aunque la subactividad continuó siendo elevada, por lo que se registraron unas pérdidas netas de 166,6 millones.

Los desembolsos por inversiones del Grupo NAVANTIA ascendieron a 16,4 millones, destacando los proyectos de adecuación de algunas instalaciones de Fene para la producción de jackets para aerogeneradores marinos, reparación de diques, renovación de equipos y los relacionados con el programa de submarinos S 81+.

El mercado de construcción naval militar registró en 2015 cierta reactivación, en el marco de contención general de gastos en armamento, según consta en el Informe Anual 2015 del Grupo SEPI, donde se encuentra inmerso el Grupo Navantia.

En torno al 80% de las contrataciones procedieron de países desarrollados, destacando Italia y Canadá que, junto con Egipto, concentraron más de dos tercios de la demanda. En los mercados militares de exportación continúa la tendencia creciente a realizar la construcción en el país cliente. Con respecto a la oferta, destaca la recuperación de los astilleros europeos (Francia, Italia y Alemania), que consiguieron programas navales para sus propias armadas y de exportación. En el mercado de buques civiles la ralentización del crecimiento de la actividad mundial ha condicionado la evolución de fletes y con ella se ha reducido la demanda de construcción en prácticamente todos los segmentos (carga convencional, LNG y off-shore), destacando la caída de la contratación de los astilleros coreanos.

El Grupo NAVANTIA contrató en el ejercicio por importe de 986 millones de euros, de los que 627,1 millones corresponden a contratos de nuevos programas de construcción naval, entre los que destacan la ingeniería de un buque LHD en Turquía, cuatro buques petroleros de tipo Suezmax para el Grupo Ibaizabal, el proyecto de definición de las fragatas F-110 para la Armada española, el “Programa de Shipbuilding Management Services” para Australia y la construcción de cinco superestructuras flotantes para el parque eólico marino Hywind.

El mercado militar de reparaciones navales, que representa el 20% de la facturación mundial, registró una ralentización en el año. No obstante, el esfuerzo realizado por la empresa en el sector civil (139 buques reparados) y la especialización en determinados mercados permitieron un año de buen nivel de actividad (184 buques reparados).

El importe de los contratos de reparaciones ascendió a 244 millones. En Ferrol-Fene, el 54% correspondió a buques gaseros; en Cádiz, el 45% a buques mercantes extranjeros, especialmente cruceros, y se realizaron trabajos para la Armada de los Estados Unidos; y en Cartagena, el 27% de la contratación correspondió a yates y el resto, prácticamente en su totalidad, a buques para la Armada española. Asimismo, la empresa llevó a cabo un importante esfuerzo comercial y de consolidación de la compañía en el extranjero, con la presentación de multitud de ofertas y la firma de acuerdos de colaboración a nivel internacional. Se ha realizado un completo trabajo de revisión del diseño del submarino S 81+, siguiendo las directrices de la Armada, resolviendo los problemas relacionados con el diseño del buque y la adecuación del sistema productivo del astillero de Cartagena. La cifra de negocio se situó en 705 millones, destacando los programas australianos, los dos BAM para la Armada española, el programa BAP para PEMEX y los jackets para aerogeneradores off-shore del campo Wikinger en Ferrol y su correspondiente subestación, y los programas de construcción y Gran Carena de submarinos en Cartagena y los ingresos de reparaciones.