Los economistas predicen que el Brexit podría reducir el PIB de los británicos entre un 1% y un 6%,
Jaime Jiménez, CEO de iContainers. En un mundo post-Brexit ¿Cómo quedará afectado el comercio británico, y cuál será el impacto en el transporte marítimo internacional? El voto mayoritario a favor del abandono de la Unión Europea en el referéndum británico ha dejado una libra inestable y un escenario económico global confuso. Siendo un país fuera de la Unión Europea, el Reino Unido tendrá que renegociar los acuerdos de comercio internacional. Muy probablemente, esto afectará a los costes debido a cambios en tarifas, cuotas y aranceles. Este post, resume el impacto del Brexit en el transporte marítimo a continuación.
Escenarios comerciales post- Brexit en Reino Unido
En 2015, el 44% del total de las exportaciones en Reino Unido estuvo dirigido a países de la UE, llegando a realizar ventas de bienes y servicios a estos países por valor de 223.000 millones de libras. Estas relaciones comerciales son actualmente no gravadas, pero esto podría cambiar considerablemente en el futuro, dependiendo del resultado de las negociaciones de los acuerdos comerciales. El abandono de la UE, representa un territorio inexplorado, dado que ningún país se ha aventurado a ello con anterioridad, de modo que las opciones disponibles para UK, no están (pero de hecho, podrían estar) modeladas a partir de las soluciones ya existentes. Estas serían:
Un acuerdo de comercio modelado después del de Noruega sería la opción más favorable para Gran Bretaña, dado que supone una especie de membresía “light” a la UE. Para conseguir acceso a la EEA, el país tendría que unirse al bloque de la Asociación Europea de libre Comercio (EFTA), pero la UE, Noruega, Islandia, Liechtenstein y Suiza como estados de la EFTA tendrían que aceptar esto. El acceso al mercado único requiere libertad de bienes, servicios, trabajo y capital. Los partidarios del Brexit se han pronunciado claramente en contra de la inmigración, de modo que la restricción del libre movimiento tendría que ser discutida.
Impacto en el comercio
El voto británico para dejar la UE, supone la primera vez tras la segunda guerra mundial, que un país opta por salir de un área de libre comercio sin sustitución. Los economistas predicen que el Brexit podría reducir el PIB de los británicos entre un 1% y un 6%, lo que supondría el ingreso de UK en un estado a medio camino entre la desaceleración y la crisis económica. De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, el crecimiento global de la economía fuera de la UE podría quedar afectado en 02 puntos. Pero es importante recordar, que el escepticismo británico hacia la UE procede principalmente de las imposiciones legales de un órgano central. El resultado del Brexit fue mayoritariamente una expresión en contra de las regulaciones y el movimiento, no en contra del flujo de capital y bienes.
Un nuevo acuerdo de comercio con la UE será inevitable. Tras la decisión formalizada de salida, en virtud del artículo 50 del tratado de Lisboa, se abre un periodo ventana de dos años para la negociación de nuevas relaciones comerciales. Sólo después de eso conoceremos el pleno impacto en el transporte internacional marítimo, ya queel marco de trabajo para la importación y la exportación tendrá que ser considerado en relación a los nuevos procedimientos aduaneros.
Desde el lado de la UE, los organismos implicados en las negociaciones incluirán el Consejo Europeo, la Comisión Europea como poder ejecutivo, y posiblemente también los estados miembros individuales europeos. El Reino Unido se enfrenta al reto de liderar estas negociaciones con su expertise para actuar de acuerdo a las prioridades de las asociaciones de comercio y negocio. Dos años pueden parecer mucho tiempo, pero el nivel de las negociaciones requerido es muy alto.
Tal y como se ve a partir de estos escenarios post-Brexit, es posible que los bienes y servicios británicos sean cargados con aranceles bajo un nuevo acuerdo de comercio. A pesar de que el Reino Unido tiene la opción de contrarrestar esto con sus propios aranceles a la importación,son los consumidores quienes sufrirán el aumento de los precios. Los aranceles y quotas de comercio reducirán probablemente la cantidad total de bienes intercambiados entre la UE y Reino Unido. Para los exportadores, acceder al mercado europeo a través del Reino Unido, será prácticamente inviable.
Lo que ya sabemos con claridad:
Comercio extracomunitario en UK, abril 2016. | iContainers
Conclusión
Una vez que el artículo 50 del tratado de Lisboa sea apelado, negociar un acuerdo de comercio en dos años será todo un reto. Intentar unirse a la EEA, pero rechazando la libertad de movimiento podría conducir a discusiones interminables. Si no se llegase a ningún acuerdo en el plazo de dos años, el actual status quo continuaría. Esto, no siendo improbable, sería difícil de aceptar para todos aquellos que votaron sí para salir de la UE.
Aunque los votantes británicos expresaron la voluntad de retraerse de la globalización con la mayoría afirmativa a la salida en el referéndum, el comercio no cesará por supuesto. Pero en lo que se refiere al flujo de personas, capital y bienes, se esperan importantes deterioros e implicaciones en el futuro.
Tras las repercusiones a corto plazo del Brexit, tendremos que esperar para ver aquellas más a largo plazo, ya que el gobierno británico está experimentando transformaciones y las negociaciones no han hecho más que empezar.
Escribe tu comentario