El Club de Exportadores reclama reformas estructurales para que el sector exterior pueda afrontar la creciente competencia internacional

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Según los datos publicados el viernes por la Secretaría de Estado de Comercio, las exportaciones españolas de mercancías disminuyeron un 27,7% en el segundo trimestre del año, con una caída del 9,2% en junio.

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El Club de Exportadores e Inversores reclama la adopción de reformas económicas estructurales que reactiven la competitividad internacional de las empresas españolas, de manera que puedan hacer frente al aumento de la competencia en los mercados exteriores que viene dada por la reducción del comercio mundial a raíz de la pandemia de COVID-19.

El hecho de que las exportaciones de mercancías en el segundo trimestre de 2020 hayan experimentado el peor comportamiento interanual registrado nunca en la serie histórica constituye, a juicio del Club de Exportadores, un potente aldabonazo para que se tomen decisiones de calado por parte del Gobierno. 

Según los datos publicados el viernes por la Secretaría de Estado de Comercio, las exportaciones españolas de mercancías disminuyeron un 27,7% en el segundo trimestre del año, con una caída del 9,2% en junio. 

Estos malos datos se enmarcan en un contexto de fuerte contracción del comercio mundial, que la OMC cifra en un -18,5% entre abril y junio. A la luz de estas cifras, el presidente del Club de Exportadores, Antonio Bonet, alerta de que “España está perdiendo cuota de mercado a nivel mundial”.

En su opinión, el comercio internacional no va a recuperar en 2021 los niveles de 2019 y, en consecuencia, se agudizará la competencia procedente tanto de países cuyo tejido productivo se ha visto menos afectado que el español como de países cuyas empresas han recibido más ayudas públicas que las españolas.

“En la crisis anterior, el sector exterior español emergió como el motor de la recuperación económica. Nos gustaría que ahora ocurriera lo mismo, pero el contexto internacional se presenta muy adverso”, sostiene Antonio Bonet.

Ante este panorama, el Club de Exportadores solicita reformas estructurales de largo alcance, que contribuyan a revitalizar la competitividad internacional de las empresas españolas. Por ejemplo, considera necesario que se fomente el aumento de tamaño de las pymes y que se acometa una reforma del sistema educativo para orientarlo a las necesidades de las empresas en un mercado global. Asimismo, considera prioritario no aumentar la tributación de las empresas ni endurecer el marco laboral.

Como dato positivo, el Club de Exportadores señala que el número de exportadores regulares en el primer semestre del año se ha mantenido estable con respecto al mismo periodo de 2019 a pesar del notable descenso del volumen de exportaciones.