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Pedro García: "Hay numerosos ejemplos de ineficiencias en sistemas de nombramientos de estibadores, horarios, cumplimiento de jornada laboral y composición de equipos de trabajo que deberían corregirse"

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La Asociación Nacional de Empresas Estibadoras celebró a principios de julio su Asamblea General donde acordó la creación de una Secretaría General que ocupa Pedro García Navarro, su director gerente hasta ese momento, quien ostenta la representación institucional de Anesco y la portavocía de la asociación ante las Administraciones Públicas y el conjunto de la sociedad. 

SpanishPorts ha querido hablar con este sevillano ingeniero de Caminos, Canales y Puertos por la Universidad de Granada sobre la etapa que afronta ahora la patronal que representa.

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El reciente cambio de estructura de Anesco y especialmente la creación de la secretaría general que usted ocupa le confiere una posición de fortaleza frente a la administración y frente a los trabajadores. ¿Estamos ante los preparativos de la gran batalla del sector de la estiba?


Nuestra asociación se encuentra ahora más fuerte y unida. Con la creación de la secretaría general pretendemos potenciar nuestra actividad además de conferirle una mayor independencia y dedicación exclusiva en la defensa de los intereses generales de todas las empresas asociadas. Pero no creo en estrategias bélicas, sino en la negociación. El sector de la estiba tiene que ir evolucionando, sin nuevas batallas en las que perdemos todos: empresas, trabajadores y sociedad en su conjunto.


¿Cuál es el papel que está llamado a jugar Anesco en el sector de la estiba española?


Somos la organización patronal mayoritaria de referencia en el sector de la estiba. Las empresas asociadas a ANESCO generan más del 75% del empleo del sector de la estiba. Por ello, ejerceremos nuestro liderazgo empresarial siendo interlocutores constructivos de las Administraciones Públicas y de las organizaciones sindicales.


¿Cuál es la situación actual del sector de la estiba?


Nos falta conocer el marco legal íntegramente. Aún se está tramitando el Real Decreto de la estiba que debe desarrollar al RDL 8/2017 aprobado el pasado año. Mientras, estamos avanzando en la negociación colectiva sectorial, pero difícilmente podremos cerrar acuerdos antes de que se apruebe este reglamento.


¿Qué retos afronta este sector de cara al futuro?


Nuestros puertos necesitan ser más competitivos para no perder tráficos porque es cierto que nuestro sector crece en volumen, pero nuestros competidores más cercanos lo hacen a mayor ritmo. Hoy estamos perdiendo oportunidades y mañana podemos perder mercados. Por eso me preocupa, por ejemplo, el tráfico de contenedores en tránsito, que representa aproximadamente la cuarta parte de las mercancías del conjunto de los puertos españoles, porque nuestros costes medios son muchos más elevados que en otros puertos alternativos. Si perdemos cuota, también saldrán perjudicados los flujos de importación y exportación.


Desde la patronal creemos que se puede mejorar nuestra competitividad, sin menoscabar derechos laborales, permitiendo que las empresas estibadoras ostenten realmente el poder de organización de las terminales, sin las actuales rigideces que poco aportan. Hay numerosos ejemplos de ineficiencias en sistemas de nombramientos de estibadores, horarios, cumplimiento de jornada laboral y composición de equipos de trabajo, etc. que deberían corregirse.


Hablemos del modelo de la estiba que se está negociando y definiendo en el decreto ¿Se prevé algún cambio de entidad fruto de este nuevo escenario con José Luis Ábalos al frente de Fomento y Ornella Chacón al frente de Puertos del Estado?


Sería deseable que el actual Gobierno incluyese en el Real Decreto las aportaciones que presentamos dentro del trámite de alegaciones. En concreto, creemos que se deben contemplar algunas cuestiones específicas para nuestro sector, respecto a la legislación general de empresas de trabajo temporal, por cuestiones simplemente operativas. Por ejemplo, cómo se formalizan los contratos o cuáles son las garantías necesarias para ejercer la actividad. También creemos que es desproporcionado incrementar las horas formativas para obtener un certificado de profesionalidad, capacitante para ser estibador, hasta más de ocho veces de lo que se requiere en la actualidad (de 80 a 660 horas prácticas) puesto que no todos los puestos de trabajo requieren lo mismo. El reglamento debe permitir que todos los ciudadanos puedan acceder en igualdad de oportunidades a esta profesión y flexibilidad suficiente para que el mercado laboral disponga de suficientes trabajadores cualificados.


¿Ha habido contactos ya con el Ministerio de Fomento y con Puertos del Estado?


De momento no ha habido ningún contacto con los nuevos responsables del Ministerio de Fomento pero, lógicamente, ya hemos solicitado una reunión porque vemos conveniente mantener un encuentro de trabajo cuanto antes, más que para plantear soluciones inminentes, para poner en común reflexiones sobre la situación del sector.


Detállenos en la medida de lo posible la hoja de ruta que está en vigor, con la administración y especialmente con los trabajadores.


En primer lugar, deberíamos conocer cuáles son los contenidos y plazos previstos para la aprobación del Real Decreto porque ese es el principal hito al que nos enfrentamos. Mientras esto ocurre, estamos trabajando en la negociación del V Acuerdo Sectorial Estatal para que, cuando ambas cuestiones estén avanzadas, podamos realizar un exhaustivo control de legalidad de los borradores que hayamos redactado como posibles convenios sectoriales. Terminado lo anterior, estaremos en disposición de comenzar a suscribir acuerdos.


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Pasemos a profundizar un poco más en las relaciones entre la patronal y los trabajadores, ¿En qué momento se encuentra la negociación colectiva con los trabajadores?


Constituida la mesa negociadora del V Acuerdo estatal del sector de la estiba, hemos mantenido diversas reuniones y seguiremos avanzando en los próximos meses, aunque cabe decir que todavía tenemos discrepancias de fondo en algunas materias. Por ejemplo: concepción del nuevo modelo, potestades empresariales de organización y control, clarificación del régimen disciplinario para evitar que comportamientos individuales dañen al colectivo, implantación de mecanismo de arbitraje para resolución de conflictos, etc. Hay otras cuestiones de índole legal que también necesitamos trabajar más, pero estoy seguro que encontraremos soluciones a todo ello. Por nuestra parte no van a faltar ganas y alternativas para alcanzar acuerdos.


¿El V Acuerdo Marco será un acuerdo de mínimos a partir del cual cada negociación en cada puerto podrá mejorar desde el punto de vista de los trabajadores?


En el V Acuerdo se negocian materias generales, que permiten estructurar las relaciones laborales en el sector. Corresponde a otros ámbitos de negociación inferior, las cuestiones más operativas como, por ejemplo, salarios, horarios, etc.


Es visible que la estiba se dirige a la automatización de muchas de sus operaciones, ¿cómo afecta esto a la negociación y cómo afectará en el futuro al sector?


La automatización es sólo un aspecto de algo mucho más profundo que ya ha comenzado: la cuarta revolución industrial -la revolución digital-. Y es que la inteligencia artificial, machine learning, robotización, nuevos intercambios de información y mayores exigencias ambientales también se extenderán en el sector marítimo portuario y nos veremos abocados a numerosos cambios tecnológicos, sociales, políticos y económicos por lo que tenemos que estar preparados. Es necesario un plan digital del sector impulsado por las administraciones públicas, así como herramientas de flexibilidad en la gestión, respetando los derechos laborales, en la negociación colectiva.


¿Cuáles son las líneas rojas que se marca la patronal que representan en referencia a este V Acuerdo Marco?


La primera línea roja es evidente: respecto escrupuloso a legislación vigente laboral, sectorial y en defensa de la competencia. A partir de ahí, avanzar para que de forma efectiva las empresas puedan desarrollar las potestades que le son propias: poder de dirección, organización y control de sus recursos humanos.


¿Es previsible que cuando se acerque el fin de la prórroga del periodo previsto para la negociación se radicalicen las posturas?


Las posturas radicales no benefician a nadie. Creo que todas las partes involucradas en la negociación somos suficientemente responsables para evitar escenarios de incertidumbre que pueden dañar mucho a nuestros puertos y a la economía española.


Para finalizar, ¿existe convencimiento por parte de Anesco de que finalizaremos el año con el sector normalizado, con el V Acuerdo cerrado y con las bases para que los años venideros sean estables en el sector?


Mas allá de plazos concretos, creo que hay que concebir la negociación colectiva y las relaciones laborales como un proceso continuo dinámico. Independientemente de un marco legal u otro, de un convenio o el siguiente, siempre hay que dialogar para buscar soluciones.

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