Esta modificación supone una renovación en la terminal del Puerto de Motril, que continúa apostando por nuevas energías que reducen las emisiones, a través del almacenamiento y la distribución de biocarburantes.
Se trata de biodiesel hecho a partir de grasas animales o vegetales, aceites comestibles reciclados, que se mezclan con gasóleo para crear un combustible más limpio. En Motril, este proceso se lleva a cabo en la planta que el Grupo Hafesa dispone y opera en la ZAL