Tras los recientes incendios de sus buques Grande Europa, esta semana, y Grande America el pasado marzo que acabó con el hundimiento de este car carrier con cerca de 2.000 vehículos a bordo, la compañía italiana requiere que haya más controles sobre las baterías de los automóviles, que pueden generar cortocircuitos e incendios a bordo de los barcos y en las terminales portuarias.
Los vuelos de reconocimiento de los medios aéreos de Salvamento Marítimo no han localizado por el momento ninguna mancha dentro de la zona de mar de responsabilidad española.
Desde el pasado jueves está activo el Plan Golfo de Vizcaya -plan de colaboración entre España y Francia en caso de siniestro en el Atlántico-, tras el hundimiento el pasado martes del buque Grande America frente a las costas francesas, a unas 180 millas al oeste de punta Penmarc´h.