​Bilboestiba recuerda a los sindicatos que cumplir la ley no es negociable

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Apela nuevamente al arbitraje como la fórmula más justa y transparente para solucionar el conflicto.

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Bilboestiba CPE, la Sociedad de Estiba y Desestiba del Puerto de Bilbao, se ve en la obligación de recordar nuevamente a los sindicatos que el cumplimiento de la ley no es negociable y que, en consecuencia, ninguna propuesta que la vulnere puede ser valorada por las empresas. Así pues, los reiterados llamamientos a la negociación por parte de los convocantes de la huelga sobre la base de propuestas ilegales solo pueden ser entendidos como meros artificios que carecen de la más mínima credibilidad. Parecen dirigidos a ganar tiempo para permanecer inmersos en una espiral delirante y prolongada que nuestro puerto no se puede permitir. No contarán con la compañía de las empresas en su destructivo viaje hacia ninguna parte.

Las empresas vuelven a apelar al arbitraje como la alternativa más justa y transparente para solucionar este conflicto, que está teniendo un altísimo coste y hace peligrar el futuro de centenares de empresas y miles de trabajadores. Además de comprometer a las partes, es obvio que la solución arbitral deberá garantizar el cumplimiento escrupuloso de la legalidad y de las resoluciones establecidas por las Autoridades de la Competencia en relación al ámbito funcional del servicio portuario de manipulación de mercancías, del cual está expresamente excluido cualquier actividad vinculada con las tareas complementarias, asegurando con ello el cumplimiento de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) de 11 de diciembre de 2014, así como el Real Decreto-ley 8/2017 y el Real Decreto-ley 9/2019. 

En cualquier caso, Bilboestiba CPE insiste en su máxima disposición a negociar en el ámbito de la negociación colectiva, sobre la base de que la misma deberá obligatoriamente quedar sujeta al vigente margo legal, por lo que cualquier planteamiento negociador deberá ir acompañado por la desconvocatoria inmediata de la huelga, evitando con ello el ingente daño que está generando a la economía vasca, por la recuperación del rendimiento laboral y la libertad decontratación de personal para las tareas complementarias.