Sigue sin haber instalaciones indias en la lista para reciclaje de buques de la UE

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La Comisión añade 7 nuevas instalaciones, pero sigue sin admitir instalaciones asiáticas, pese a que reciclan el 97% del tonelaje de los buques en todo el mundo.

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(ANAVE) La Comisión Europea (CE) publicó, el pasado 20 de enero, la sexta versión de la lista de instalaciones admitidas por la UE para el reciclaje de buques y en la que incluye 7 nuevas instalaciones: 3 en Turquía, 1 en Letonia, 1 en Países Bajos, 1 en Lituania y 1 en Noruega.

En conjunto actualmente la lista la integran 41 instalaciones:

• 34 en el Espacio Económico Europeo: 6 en Noruega; 5 en Dinamarca; 4 en Francia, Reino Unido y Lituania; tres en los Países Bajos (3); dos en Letonia y una en Bélgica, Estonia, España, Italia y Finlandia.
• 7 en terceros países: 6 en Turquía y 1 en EE.UU.

Según los datos aportados por la propia Comisión, las instalaciones de la lista suman una capacidad anual de unas 996.000 toneladas de desplazamiento en rosca (LDT), lejos aún de los 2,5 millones de LDT mencionados en el Reglamento sobre Reciclaje de Buques UE 1257/2013.

Dicha lista sigue sin incluir instalaciones de países asiáticos, donde se sitúa el 97% de la capacidad de reciclaje mundial de buques. La UE ha recibido hasta ahora las solicitudes de 36 instalaciones extracomunitarias, de las cuales 18 proceden de la India y otras 4 de China. Por el contrario, ya ha admitido las solicitudes de 6 instalaciones turcas, de un total de 11 solicitantes.

A propósito de un informe de BIMCO sobre esta lista europea, publicado el pasado año, Nikos Mikelis, director no ejecutivo de GMS, afirmaba que las auditorías de la CE deberían reconocer y recompensar los esfuerzos que muchas instalaciones de la India han hecho por mejorar la seguridad de sus trabajadores y la protección del medio ambiente en sus operaciones y que las instalaciones europeas sean sometidas a inspecciones de una exigencia similar al resto.

De otra manera, como concluye el mencionado informe de BIMCO, no se cumpliría el objetivo original del reglamento europeo de reciclaje, de luchar contra la contaminación y las malas condiciones laborales y serviría “simplemente proteger el mercado europeo de reciclaje”.

Esta Decisión entró en vigor 20 días después de su publicación en el DOUE.