Hoy puede ser un gran día ¡Y mañana también!

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La inauguración del Puerto de Granadilla aglutinará en torno a ese recinto portuario a las máximas autoridades nacionales y canarias, además de portuarias. Un buen momento para reflexionar sobre su futuro.

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Como decía Serrat en su canción, 'Hoy puede ser un gran día', 'aprovecharlo o que pase de largo depende en parte de ti'.

Mañana estará el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, acompañado por el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna y el presidente de Puerto del Estado, José Llorca, entre otras autoridades en la inauguración del Puerto de Granadilla, arropando a Ricardo Melchior, presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife.

Si nos ponemos las gafas del optimismo, la inversión tras diez años de batallas ya está hecha y finalizada y ha generado mucho negocio y mucho empleo, todo hay que decirlo. Y más tarde o más temprano estará plenamente operativa.

Han habido tres presidentes portuarios implicados en este proyecto, Luis Suárez Trenor, Pedro Rodríguez Zaragoza y, el actual, Ricardo Melchior. A ellos les debe Canarias esta obra, y la historia se escribirá en función de las decisiones que se tomen a partir de ahora. 

La cuestión es saber cuál será su uso final, ya que en la medida en que seamos capaces de discernir esta pregunta estaremos ahorrando mucho tiempo y dinero público.

El anuncio de colocar casi una docena de plataformas y buques perforadores hecho a finales de año por el presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife, Ricardo Melchior, quedó en una sacada de pecho a destiempo, ya que la apuesta se quedó en dos unidades. Por otra parte, la ubicación del "mayor dique flotante de Canarias" digno competidor de los astilleros ubicados en la isla vecina de Gran Canaria se ha quedado en la mitad, y su destino más que probable será el achatarramiento.

Por tanto, ante tanta autoridad nacional regional y local que estarán presentes, si el tiempo lo permite, inaugurando un muelle aún prácticamente vacío, estaría bien oir de la boca de alguien con cordura un plan estratégico para su puesta en marcha. 

Un desarrollo sustentado sobre un estudio serio y coherente que no caiga en copiar lo que hace el de al lado, porque eso además de que no funciona habitualmente, lo único que consigue es dividir en dos un segmento de negocio que ya funcionaba en otra ubicación. Somos muy dados a plagiar iniciativas, sean portuarias o editoriales.

Pero volvamos a lo que nos ocupa. Un puerto de dimensiones importantes sin actividad prácticamente de momento, otro puerto saturado, el de Los Cristianos, con malas comunicaciones. No será una buena idea aprovechar infraestructuras ociosas en vez de plantearse nuevas infraestructuras de acceso para Los Cristianos o un nuevo puerto regional para absorver ese movimiento. Dicho queda.