La Fundación Valenciaport se acreditó ante la Agencia Estatal de Administración Tributaria para impartir dicho curso y ofrecer a sus alumnos un elemento diferenciador: éstos quedan exentos de la prueba teórica una vez superado el curso, lo que supone una clara ventaja con respecto al resto de aspirantes a ser acreditados como representantes aduaneros.