Villauriz se ha reunido primero con las Organizaciones de Productores Pesqueros (OPP) y posteriormente ha mantenido un encuentro online con la Federación Nacional de Cofradía de Pescadores (FNCP).
Para traer a puerto alimento de primera necesidad la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores acuerda desconvocar el paro de la flota, y confiar en las medidas que da el Ministro. El Gobierno apoyará al sector pesquero por el incremento de los costes de explotación y trabaja en la norma que habilitará los fondos europeos para asegurar la actividad de la flota
Cofradías, armadores y minoristas apelan al sentido común de los gobernantes para que fijen una estrategia homogénea y a tiempo en toda España de cara a estas fiestas.
Califican de error la integración del IEO en el CSIC ya que arriesga su identidad, cultura, autonomía, independencia económica y capacidad de interlocución directa con el sector pesquero.
El sector teme el impacto de la crisis económica en la demanda de productos pesqueros que, junto a las limitaciones impuestas por el COVID, amenaza su futuro.
El relevo de las tripulaciones sigue amenazado por la falta de test de detección, sin que el sector obtenga permiso del Gobierno para comprarlos directamente.
La necesidad de ingresos ha llevado a muchos buques de bajura a volver a faenar, lo que está generando caídas de precios en primera venta por falta de mercado. En muchos casos, la merma creciente de la facturación, sumada a la falta de financiación, supone la pérdida de la rentabilidad y puede abocar a cierres y despidos.
El sector pesquero español ha presentado un recurso de alzada ante el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, contra la Resolución de la Dirección General de Trabajo, recibida el pasado mes de septiembre, que dice que los trabajadores a bordo de un barco de pesca están obligados a “fichar”, al establecerlo así el Real Decreto Ley 8/2019 de 8 marzo.
Le ha manifestado la imposibilidad práctica de dar cumplimiento a esta obligación, teniendo en cuenta las peculiaridades e imprevisibilidad de su actividad, sujeta a factores de difícil control, tales como los meteorológicos o la situación de la propia actividad pesquera.
El sector ha tomado esta decisión tras conocer la propuesta de un importante e injustificado recorte salarial para estos trabajadores.